Himalia: naturaleza, localización y fotografía
Observación
Himalia (también conocida como Jupiter VI) es el mayor de los satélites irregulares de Júpiter. Fue descubierta por Charles Dillon Perrine el 3 de Diciembre de 1904 desde el Lick Observatory, obteniendo su nombre actual recién en 1975. Himalia es el quinto satélite de Júpiter en cuanto a masa (solo superada por los cuatro satélites galileanos, los que normalmente son observables), y el sexto en tamaño con 170 kilómetros de diámetro. Pertenece al llamado "Grupo Himalia", un conjunto de satélites irregulares con órbita prógrada que siguen trayectorias similares, lo que sugiere un posible origen común. Actualmente se conocen cuatro satélites pertenecientes a este grupo: Leda, Himalia (el más masivo, y que le da nombre al grupo), Lysithea y Elara. Se sospecha que también el satélite S/2000 J11 pueda pertenecer al grupo, pero no se ha llegado a definir su órbita exacta. De hecho, se especula con que este objeto, de un tamaño estimado en los 4 kilómetros, pudo haber colisionado contra Himalia, ya que en Marzo de 2010 la nave New Horizons, camino a Plutón, detectó un tenue anillo, no observado antes de 2003, que podría ser el resultado de esta colisión.
Por las características que comparten los miembros del grupo Himalia, se especula con un origen común para ellos. Poseen un índice de color comparable al de los asteroides tipo C (carbonaceos, los más comunes, de superficies muy oscuras) lo que sugiere que la fractura de un cuerpo mayor dio origen al grupo, quedándose Himalia con la mayor parte de la masa del cuerpo original.
Imagen de Himalia tomada por la nave New Horizons de la NASA
Himalia orbita Júpiter a una distancia que va desde los 9.8 a los 13.1 millones de kilómetros (entre 25 y 34 veces la distancia media entre la Tierra y la Luna), con un período de 250.56 días. Esta gran distancia entre Júpiter e Himalia da como resultado que la separación aparente entre los dos objetos puede llegar a ser de más de 1°, lo que hace posible su detección y fotografía sin que el gran brillo de Júpiter interfiera (otro satélite, Amalthea, es más grande y algo más brillante que Himalia, pero el radio su órbita es de solo unos 180 mil kilómetros, con lo que queda inmerso en el brillo del planeta) La magnitud de Himalia dependerá de la distancia entre la Tierra y el sistema joviano, variando entre 14.5 y 15.5, siendo los momentos más favorables los de fechas cercanas a la oposición de Júpiter. Por su pequeño tamaño, por supuesto, Himalia siempre presentará un aspecto estelar.
Considerando estos elementos, para lograr localizar a Himalia hay que valerse de efemérides precisas en ascensión recta y declinación, para así comparar la posición del objeto con una carta detallada (preferentemente fotográfica) de la zona, e identificar a Himalia entre las estrellas. El movimiento de Himalia respecto del fondo de estrellas estará dado por dos factores: el movimiento orbital del satélite alrededor de Júpiter, y el movimiento de todo el sistema joviano, arrastrando consigo a Himalia. Entre dos noches consecutivas normalmente el factor más notable será este último, el movimiento de Júpiter.
El gráfico superior muestra la trayectoria de Himalia respecto a Júpiter: centrado en cero, la escala representa los segundos de arco que distancia al satélite del planeta.
El proyecto fotográfico llevado a cabo por el autor tenía como objetivo capturar a Himalia en dos cuadros y crear una animación que muestre su movimiento contra el fondo de estrellas. Se realizó, luego de un buen tiempo de planeación, en dos noches consecutivas, localizando el campo de Himalia por coordenadas, utilizando como fuente de las mismas el JPL Horizons. El telescopio utilizando fue un pequeño refractor de 80 mm de apertura y 400 mm de focal (F/5), con una cámara Canon EOS 300D. Esta combinación otorga un campo real de unos 3° x 2°, del cual (por cuestiones ópticas) es aprovechable alrededor del 50% del área central. Pueden ver la animación de Himalia aquí (click sobre la muestra de abajo)
Click sobre la imagen para ver la animación a tamaño completo.
Aunque se requiere de un telescopio mediano y cielos oscuros, Himalia puede llegar a detectarse visualmente si las condiciones lo permiten. Los dos principales puntos a tener en cuenta serán: disponer de una carta de localización detallada para la fecha de observación, y que se den las condiciones de instrumental y locales para detectar magnitudes estelares de alrededor de +15.